Aguas de Socorro
Las Aguas de Socorro, era una forma de bautismo de urgencia llevado a cabo por cualquier persona creyente y bautizada y puede ser administrado con agua corriente o de botellín, siempre que sea pura, es decir limpia y sin contaminar, ni que tenga aditivos. El bautismo de urgencia, se aplica con la Señal de la Cruz sobre la frente del bebé moribundo y pronunciando las palabras ‘Yo te bautizo en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo con el nombre de…’, así su alma, ya puede ir al Cielo por estar reconocido como Hijo de Dios por la Iglesia Católica.
Algunas comadronas, administraban las Aguas de Socorro a bebés que nacían muertos, pero oficialmente no servía de nada porque el alma ya se había ido del cuerpo y la Iglesia no admitía su registro. Era solo un acto de bondad y de conciencia por parte de la persona que las administraba.
El bautismo se legaliza con la inscripción del mismo, ante la Parroquia a la que pertenece el Hospital/Clínica, si este no tiene Capilla bendecida para administrar sacramentos y solo es considerada un Oratorio. Si lo está, el registro se queda en la Iglesia del Hospital/Clínica.
Se pueden consultar los datos, de los bebés que las han recibido antes de morir, en los Arzobispados u Obispados provinciales o acudiendo a la Parroquia a la que pertenece el Hopital/Clinica o al mismo Hospital/Clinica si la Capilla del mismo, tiene consideración eclesiástica de "Parroquia".